La Asociación de Enfermos y Trasplantados Hepáticos de Navarra (ATEHNA) mostró ayer  “de primera mano” a los alumnos del centro integrado Politécnico Estella que “donar órganos salva vidas”, con el objetivo de “educar desde la juventud en el valor de la donación”. De esta forma, personas que han salvado la vida gracias a un trasplante de hígado dieron una charla, en la primera actividad de ese colectivo en el ámbito educativo en la ciudad del Ega.

Todavía hay personas que se siguen muriendo por falta de órganos. Antes del verano, había 70 personas en Navarra que necesitaban un órgano. En esta situación, tenemos que concienciar a la sociedad de que un donante de órganos puede salvar la vida de hasta siete personas”. La falta de información está detrás de que la familia desconozca la voluntad de una persona fallecida. Ante el espectacular descenso de los accidentes de tráfico, hay menos donaciones. Los donantes en vivo son minoritarios. En esta práctica, se extrae una parte del órgano del donante vivo, que posteriormente se regenera.